Raro, muy raro. Pero genial, muy genial.
Yo creía que no podía hablar de lo que pasaba, aunque no pasara nada. Estaba gratamente equivocada.
Nena, tengo que hablar con vos. ¿De qué? De esto. ¿De qué? De nosotros. ¿De nosotros? Sí, quiero saber si te lo estás tomando en serio porque- No, no me lo estoy tomando en serio. Bueno, porque para mí no es algo serio y tampoco te quiero joder. No, quedate tranquilo, no es serio.
Mirada. Beso. Beso. Beso. Sonrisa. Sonrisa. Sonrisas.
Después de eso me dijo casi-cosas-lindas (inédito hasta entonces) y los besos fueron tan dulces que al café no le pongo más edulcorante por una semana.
3 comentarios:
OMG!!! Pues siendo asi, solo queda disfrutarlo o irse retirando poco a poco para evitar el golpe llegado el momento
Saludos
ME ENCANTÓ EL COMENTARIO DEL EDULCORANTE...UN BESO!
muy lindo el post G
Felizmente instrascendente....
un beso
ps. gracias por tu comment
xoxo
Publicar un comentario