19.11.15

pedacito de antes

Te extraño un poco. Y hoy lo puedo decir en serio, sinceramente, mirando para atrás desde este llugacito que tanto tardé en armarme, mío de pe a pa, lleno de detalles que sólo yo entiendo, cerrado al público. Desde acá digo que te extraño porque lo creo. Te extraño a vos, persona, no al vínculo que representaste. Te extraño a vos, hombre, compañero, manos grandes y risa infantil, canciones para musicalizar la cocina. Extraño algunas de tus mañas y extraño algunas otras cosas. Y, sin embargo, ya no me acuerdo de tu voz. Me acuerdo de que me encantaba, me acuerdo de que me tocaba hasta la más profunda de las fibras del alma, pero no me la acuerdo. Igual te extraño un poco, antes de rendir, después de un mensaje lleno de nada que reemplazó a mensajes llenos de corazoncitos de colores. Ya no hay más nada de eso, ya no quiero eso, ya no lo extraño y tampoco extraño eso de vos. Pero sí, lo que extraño de vos es a vos. Un pedacito de antes con forma de lágrima de ahora que se seca en la almohada de rayas blancas y moradas y se convierte en otro recuerdo más,  porque mañana rindo y ya tengo que dormir.