9.12.09

Me di cuenta de dos cosas.
Primero, si no me controlo, me vuelvo horriblemente monotemática. Mal, muy mal.
Segundo, por más que piense y piense, por mucho que repase mentalmente frases posibles, oraciones no-ridículas para decir en determinado momento, cosas que muero por decir(le), cuando estoy con él todo se me va a la mismísima mierda. No me acuerdo, no me animo, no encuentro el momento, no quiero, muero de miedo, no quiero espantarlo o lo que sea.
Son conclusiones interesantes (ah, sí, claro) a las que llegué después de ayer (si mañana o alguno de estos días tengo ganas, escribiré al respecto).

1 comentario:

Juani dijo...

es inevitable, cuando tenemos a esa persona enfrente, el boludometro toca techo, y no podemos decir lo que le queriamos decir, ni siquiera podemos decir lo que estamos pensando. En fin, una situacion jodida, pero esta tontera casi adolescente es hermosa

esperemos q escribas al respecto uno de estos dias

un beso :)